Febrero en Bangkok, o como pasaron 5 meses sin darnos cuenta

Además de viajar un montón, que no hace falta decir que no paramos, nos gusta disfrutar de Bangkok entre semana o algun finde que nos quedamos. Me asombra ver como la gente se asombra cuando digo que me encanta Bangkok. Bangkok será caótica, estresante o lo que sea, pero a mi me parece genial, bonita y con miles de cosas con las que pasártelo bien. Y sino, miren y consulten todos los posts etiquetados con Bangkok de este blog!

En febrero tuvieron lugar las celebraciones de año nuevo chino y fuimos a ver qué se cocía por Chinatown, que simplemente por tener los zumos de granada más buenos del mundo ya es uno de mis barrios favoritos de la ciudad. Era mi tercera vez en Chinatown pero nunca lo había visto así: gente, luces, colores, mercadillos y comida allá donde miraras...  Nos encantó pasearnos por allí e hicimos el descubrimiento de uno de los templos más bonitos de Bangkok. ¡Una maravilla iluminado por la noche!

Además de Chinatown, también nos ha dado tiempo este mes a descubrir más la noche bangkokiana acompañados de thais, muuuy guai!

Y de uno de tantos ratos que pasamos juntos los becarios, quedó inmortalizada una de las tardes ociosas que pasamos en Siam, el centro de Bangkok. Además de hartarnos a embutidos que nos mandan las mamás y jugar al Catan y al Munchkin, también nos gusta salir a cenar por ahí y adentrarnos en el bullicio de los centros comerciales.

Lo mejor de la tarde, sin duda las fotitos que nos hicimos en un fotomaton japones!! Sisi, son cutres, horteras pero... y lo moniiiiiisimos que salimos?? :) :)

Y por fin nos fuimos al bowling! Que llevabamos tiempo diciendolo! Muy guai el bowling-discoteca que tienen montado esta gente. Tirar los bolos a ritmo de paparamericano moooooola! :)

Y entre viajes, Bangkok y el trabajo (que también trabajamos y muuuchoooo aunque no os lo creáis) han volado 5 meses, pero los hemos vivido al máximo. Que siga la aventura en Tailandia, un país en el que cada día te sorprende algo...

:)